Las agendas son la herramienta perfecta para organizar nuestro día a día, ya sea en el ámbito estudiantil o laboral. Te permite planear con antelación, dejando que tu mente se libere de la tensión de tener que recordarlo todo. Asimismo, también te ayuda a pensar en tus metas y tener una mejor administración del tiempo, pudiendo dividir un día en pequeñas tareas.
Las agendas son imprescindibles para que no pierdas de vista tus objetivos. Antes de utilizarlas, es muy útil marcarte tus metas y saber para qué la necesitas. De esta forma podrás escoger la que más se acerque a lo que necesitas. ¿Quieres saber qué tipos de agendas hay? Sigue leyendo.
Tipos de agendas que existen
Usar una agenda tiene múltiples beneficios, aunque el mayor es que logra que estés al tanto de tus horarios y puedas llegar a cumplirlos. También te ayudará a mantener cierto equilibrio entre tu vida laboral y tu vida personal, consiguiendo que puedas tener ambas. ¿Pero qué tipos de agendas hay?
Según la forma de administrar el tiempo
La agenda clásica de toda la vida es la semanal que empieza en septiembre y acaba en agosto del año siguiente. Aquí tendrás en dos caras la semana de lunes a domingo y podrás ir rellenando cada hueco según lo que necesites. Esta es ideal para aquellas personas que no tienen que hacer demasiadas cosas al día o que apuntan solo lo imprescindible en sus agendas.
En este mismo formato, siendo también escolar, estaría la diaria. En este tipo, sería una página por día y tendrías todo el espacio que necesitas para todas tus tareas, pudiendo incluso organizarte por horas. Es muy útil si eres de los que apunta todo lo que tiene que hacer.
Después estarían las agendas mensuales, es decir, las que muestran simplemente una cuadrícula del mes para que vayas apuntando todas las citas, exámenes o tareas importantes que tienes que hacer. Son muy útiles si te gusta poner solo lo más imprescindible, es decir, las fechas de entrega.
Por último, estaría la agenda anual, que es la que sigue el orden natural de los años. Es decir, va de enero a diciembre. Esta es perfecta para quienes se marcan sus propósitos el 1 de enero o para las personas que trabajan, habiendo dejado ya atrás la época estudiantil.
Según el tipo
Además de elegir las agendas por su formato en cuanto a organización diaria, también se pueden elegir por el tipo. Por ejemplo, están las agendas Oxford que son las clásicas de anillas, con calendario interior que te ayuda a apuntarte cumpleaños, aniversarios, teléfonos y mucho más. Estas suelen ser las que más eligen los niños, pues suelen ir acompañadas de dibujos alegres.
También están los calendarios, perfectos para los trabajadores y estudiantes que necesiten saber con seguridad el día que es para sus labores. Nos ayudan a organizarnos y hacernos una rutina, además de poder colgarlo en la pared para verlo siempre.
Por último, estarían los dietarios. Este podemos llevarlo más como un diario personal en el que apuntar todo lo que se nos viene a la cabeza a lo largo del año, además de introducir tanto los ingresos y gastos como las citas que tengamos día a día.
Ahora que ya sabes los tipos de agenda que hay, es el momento de ir a por la tuya. En nada llega el 2024 y hay que estar preparados. ¿A qué esperas? Echa un vistazo a nuestro catálogo para encontrar lo que necesitas.