En el sector de la pintura, ya sea de manera profesional o como aficionado, existen dos técnicas populares: acuarela y témpera. Es normal confundirlas porque tienen una apariencia similar, pero cada una tiene sus propias características y, por supuesto, se utiliza en situaciones diferentes.
A continuación, repasamos cuáles son las diferencias clave entre la acuarela y la témpera para ayudarte a elegir la mejor opción en tus proyectos artísticos. ¿Nos acompañas?
Acuarela: así es esta técnica
La acuarela es una pintura conocida por su transparencia y sutileza. Esta técnica se basa en pigmentos solubles en agua que se aplican sobre papel de acuarela. Eso sí, hay algunas características importantes y diferencias que permiten entender cuál es su uso más recomendado.
- La textura del papel de acuarela es fundamental para esta técnica. Un papel grueso y absorbente evita deformaciones, además de permitir la creación de efectos especiales.
- La transparencia es una de las características distintivas entre la acuarela y la témpera. Como se pueden superponer capas de color, es más fácil conseguir una amplia gama de tonos y matices. Por eso, es una elección ideal para retratos y paisajes en los que la delicadeza es fundamental.
- La mezcla de colores es una parte muy importante de la técnica de la acuarela. Los pigmentos se mezclan fácilmente en el papel, lo que permite una creatividad prácticamente ilimitada.
- El secado rápido es una de sus grandes ventajas. Es muy útil para los que necesitan un secado en poco tiempo, al aire libre o quieren terminar un trabajo de manera mucho más efectiva. Por supuesto, permite avanzar rápidamente en el proceso creativo.
Témpera: una técnica muy versátil
La acuarela y la témpera tienen muchas diferencias importantes. Por supuesto, esta última también tiene sus propias particularidades:
- La opacidad de la témpera ofrece una cobertura muy sólida desde el primer trazo. Por eso, es ideal para proyectos con colores intensos y que requieren un acabado mucho más vibrante.
- La versatilidad de la témpera se refleja en su capacidad para adherirse a una variedad de superficies, como papel, cartón, lienzo o madera. Es perfecta sobre todo para proyectos escolares, manualidades y trabajos decorativos en superficies muy diferentes.
- Aunque es posible mezclar colores en témpera, es más difícil conseguir la misma sutileza que con la acuarela.
- La témpera tarda más en secarse, pero puede ser una gran ventaja para hacer cambios y correcciones durante el proceso. Por eso, es una técnica muy útil en proyectos que requieren un gran nivel de detalle o a gran escala.
Usos y aplicaciones de acuarela y témpera
Si ya tienes en mente cuál será tu próximo proyecto y dudas entre acuarela y témpera, ¡te contamos cuál es más adecuada para cada trabajo! Elegir una u otra depende fundamentalmente del resultado esperado, de los colores y del tipo de superficie.
La acuarela es la técnica más adecuada para los artistas profesionales que necesitan transparencia y delicadeza, sobre todo cuando se trata de paisajes, retratos o piezas de alta calidad. En el lado opuesto, también es ideal para las manualidades de los más pequeños. Es muy fácil de limpiar y permite mezclar colores de manera segura.
En cambio, los ilustradores y diseñadores suelen preferir la témpera para conseguir colores intensos y vibrantes. En el caso de las manualidades o de los proyectos decorativos, es normal decantarse por esta técnica cuando se necesita pintar sobre distintas superficies. La témpera, por ejemplo, es perfecta para proyectos de decoración en madera, cartón o cerámica.
Ahora que ya conoces las diferencias entre la acuarela y la témpera, ¡llega el momento de que te expreses sin límites! En Carlin encontrarás siempre tus colores favoritos y, por supuesto, un amplio catálogo con referencias de papelería que cubrirán por completo tus necesidades.