La digitalización ha llegado a todos los sectores y ámbitos de la sociedad, y está presente en pequeños detalles que ya forman parte de nuestro día a día. De hecho, muchos de ellos ya los hemos interiorizado y normalizado, sin pararnos a pensar en el cambio que han supuesto. Hoy queremos que te fijes en uno de los elementos que hoy en día es digital, pero que no siempre ha sido así: las pizarras digitales. Ya sea en los colegios e institutos, en las oficinas o en los grandes salones de eventos, es fácil encontrar este tipo de dispositivos. Pero, ¿sabes cómo aprovecharlos al máximo? ¡Te lo contamos!
¿Qué es una pizarra digital?
Las pizarras digitales son conjuntos formados por una pantalla, un proyector y un ordenador o cualquier otro dispositivo que ofrezca conexión a Internet. Su funcionamiento es muy sencillo: el contenido del ordenador se proyecta directamente sobre una pantalla situada en un soporte, que actúa como si fuera el monitor.
Una de las diferencias más importantes que existe con respecto a un proyector al uso es que, en las pizarras digitales, lo habitual es que podamos escribir sobre ella igual que si lo hiciéramos sobre una pizarra tradicional. Por este motivo, también se conoce a las pizarras digitales como pizarras interactivas.
Consejos para sacar el máximo partido a las pizarras digitales
La facilidad de uso de las pizarras digitales ha sido clave para que hoy en día sean uno de los dispositivos que no puede faltar en un aula o en una sala de reuniones de una empresa. Tanto es así que no todo el mundo conoce todos los beneficios que ofrecen estas pizarras. Así que vamos a resumir algunas ideas que te ayudarán a exprimir al máximo todo su potencial.
- Elemento multimedia. Las pizarras digitales no solo permiten mostrar contenido, sino modificarlo al instante. Puedes escribir, tomar notas o resaltar una parte del texto desde la propia pantalla.
- Funcionalidad educativa. La posibilidad de que los niños manejen este tipo de pizarras digitales desde que comienzan su etapa educativa hace que desarrollen habilidades multimedia de manera más rápida.
- Más dinamismo. Tanto si estás presentando un proyecto como si estás impartiendo una clase, las pizarras interactivas aportan más dinamismo, porque no es necesario «perder tiempo» manejándolas. No hace falta mando a distancia ni hay que estar al lado del ordenador, sino que se pueden gestionar los contenidos desde la misma pantalla.
- Memoria visual y capacidad de síntesis. Utilizar este tipo de dispositivos ayuda a desarrollar la memoria visual y a sintetizar y esquematizar. Y es que nos permite aprender a gestionar todo el contenido en un espacio limitado.
Las pizarras digitales son un claro ejemplo de cómo la evolución tecnológica permite adaptar la forma de educar y de comunicar de manera más efectiva y práctica, al tiempo que ayuda a desarrollar determinadas aptitudes digitales. Así que, si estás pensando en incorporar una, en Carlin Online te ayudamos a elegir la que mejor se ajusta a tus necesidades. ¡Reescribe tu futuro!
